poludio
24.7.14
mientras tanto mejor me parece esperar
El año pasado uno se murió sin avisar. Este año hay un par que no terminan de despedirse. Leyendo comentarios que alientan a seguir dando pelea publicados por sus amigos y compañeros de ruta, entran ganas de morirse rápido a cualquiera. Ahora, considerando con algunas excepciones, que casi todos integramos una misma franja etaria y que la mayoría tenemos mil, dos mi y hasta cinco mil contactos, no quiero pensar en lo que va a ser Facebook dentro de 30 o 40 años cuando empecemos de a uno en fondo a estirar la pata, haya uno o dos velorios al día y tengamos que decidir a cuál de esos dos eventos asistir. Además, entre las quejas y admoniciones de los que van a tomar plena conciencia de su condición mortal mientras se están yendo, el recuerdo fresco de quienes los precedieron, unido a las demostraciones de cariño de los que todavía están, Facebook va a ser una casa de pompas fúnebres, un embole.